Un esguince es una lesión del ligamento (que es el tejido que conecta los huesos de las articulaciones y les brinda estabilidad) cuando se distiende o rompe.
Habitualmente ocurre cuando hay un sobre-estiramiento del ligamento.

Los más frecuentes son los del miembro inferior: tobillo y rodilla. Pueden ocurrir por diversas causas, como algo tan común como la que llamamos “doblada de pie” en el caso de los esguinces de tobillo.

Si bien el rango de leve a severo en el caso de los esguinces es amplio, siempre se recomienda consultar a un médico a fin de confirmar el diagnóstico y definir el tratamiento.

Como primeros pasos apenas ocurren es importante:

• No mover la articulación esquinzada y mantenerla elevada y en reposo.
• Colocar inmediatamente hielo a fin de disminuir el dolor y evitar una gran inflamación.
• En algunos casos, se sugiere también vendaje compresivo en la zona con el mismo objetivo.
• Puede que el médico le recomiende algún analgésico o anti-inflamatorio para el dolor.

Una vez diagnosticada la severidad del caso, el tiempo que lleva recuperarse de un esguince depende de la articulación y del tipo de esguince, pero puede ser de aproximadamente 6 semanas, siempre siguiendo las instrucciones del médico y especialmente, con estos primeros pasos al ocurrir el incidente, que influyen en la recuperación final.