Cuando corremos la cadera soporta hasta seis veces más el peso del cuerpo. Además de transmitir el peso de la parte superior del cuerpo a las extremidades inferiores, la cadera tiene otra función: facilitar los movimientos de las piernas en todas las dimensiones del espacio cuando las flexionamos, las estiramos, las rotamos. Por ello, no es de extrañar que aparezca…
